La cocción en blanco es una técnica de cocinado que se emplea en repostería y que consiste en cocer una masa moldeada con un falso relleno de legumbres secas o elementos aptos para esta cocción. Este relleno ficticio se usa para mantener la forma y estructura de la masa durante la cocción, evitando que se contraiga o se caiga.
Para qué se utiliza la cocción en blanco
La cocción en blanco se utiliza principalmente para cocinar masas como tartaletas, quiches y otros tipos de pasteles y tartas.
Esta técnica permite que la masa quede crujiente y no cruda, ya que al no tener humedad en su interior durante la cocción se cocina de manera más eficiente.
Cómo se realiza la cocción en blanco
Para realizar cocer en blanco u hornear en blanco, se sigue un proceso similar al de cualquier otra receta de cocción.
- Se prepara la masa y se coloca en el molde deseado.
- Se añade el falso relleno que se utilizará para mantener la forma y estructura de la masa durante la cocción.
- Se coloca el molde en el horno y se cocina según las instrucciones de la receta.
- Se retira del horno y se retira el falso relleno para proceder con el siguiente paso de la receta.
Ventajas de cocer u hornear en blanco
- Permite cocinar masas de manera más eficiente, evitando que queden crudas o húmedas.
- Ayuda a mantener la forma y estructura de la masa durante la cocción.
- Permite obtener una masa crujiente y que no esté húmeda.
- Es una técnica versátil y puede utilizarse con diferentes tipos de masas y rellenos.
- Es fácil de realizar y no requiere habilidades especiales de cocina.
- Puede utilizarse para preparar una gran variedad de recetas, desde tartas hasta quiches y pasteles.
- Ayuda a conservar el sabor y textura originales de la masa, ya que no se mezcla con el relleno durante la cocción.
- Es útil para preparar recetas vegetarianas o sin gluten, ya que se pueden utilizar legumbres secas o ingredientes aptos para esta cocción como relleno ficticio.
Tipos de masas y rellenos para cocer en blanco
- Masas de hojaldre o pastelería: son ideales para preparar tartas y quiches.
- Masas brisa o pâte brisée: son más crujientes y adecuadas para preparar tartaletas y empanadas.
- Masas quebradas o pâte sucrée: son más dulces y se utilizan para preparar tartas dulces y pasteles.
En cuanto a los rellenos, puedes emplear legumbres secas como arvejas, judías, lentejas o guisantes, u otros ingredienetes como arroz, pan rallado o copos de avena.
También puedes utilizar rellenos de verduras, frutas, carnes o pescados, según lo que prefieras o necesites para la receta que estés preparando.
Consejos para realizar la cocción en blanco
- Utiliza un molde adecuado y engrasado para evitar que la masa se pegue.
- Añade suficiente falso relleno para que no se deforme la masa durante la cocción.
- Cocina la masa a una temperatura adecuada y durante el tiempo necesario para que quede crujiente y no cruda.
- Retira el falso relleno con cuidado para evitar romper la masa.
- Sigue las instrucciones de la receta y ajusta los tiempos y temperaturas según sea necesario.
¡Qué interesante! Nunca había escuchado sobre la cocción en blanco. Definitivamente, quiero probarlo ahora.
¡Me alegra que hayas descubierto algo nuevo! La cocción en blanco es una técnica fascinante que puede realzar el sabor de los alimentos. Te animo a probarlo y compartir tu experiencia. ¡A cocinar se ha dicho!